El acuerdo con el Fondo Monetario ya es un hecho: la Argentina accedió a un programa "stand by" de alto acceso por u$s50.000 millones. Pero los encuentros del Gobierno con el organismo de crédito continúan.
En este sentido, el presidente Mauricio Macri fue invitado por el primer ministro de Canadá, Justine Trudeau, para participar de la cumbre del G7 que se realiza en Charlevoix, al norte de Québec.
Este viernes a las 20.30, Macri y su mujer, Juliana Awada, partieron hacia tierras canadienses. El mandatario mantendrá un encuentro este sábado a las 16 de ese país (17 de la Argentina) con Christine Lagarde, directora del FMI.
Por la mañana, el jefe de Estado argentino realizará reuniones bilaterales con Trudeau y la canciller alemana Angela Merkel. El G7 está integrado por el grupo de países desarrollados que conforman Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y el Reino Unido.
La próxima reunión de la conducción del organismo se realizará el 20 de junio. El anuncio del FMI se conoció casi un mes después de que Macri oficializara el inicio de conversaciones con el organismo para acceder a un crédito.
La primera reunión formal se concretó en la segunda semana de mayo y luego de múltiples visitas de funcionarios del gobierno a Washington, incluida la que realizó el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne dos días después de hacerse pública la decisión de recurrir al Fondo, el entendimiento recibió el visto bueno.
En sintonía
La reunión entre Lagarde y Macri será la primera luego de la asistencia financiera por u$s55.000 millones que el Fondo aprobó para la Argentina. La titular del organismo fue siempre elogiosa del "rumbo económico" y el "programa de reformas" de Cambiemos.
Por ello no sorprendió que, tras conocerse la aprobación del financiamiento, Lagarde celebrara y avalara mediante un comunicado la decisión del Gobierno de acudir al ente de crédito multilateral.
De esta forma, felicitó a las autoridades argentinas y subrayó que se trata de "un plan concebido e instrumentado por el gobierno argentino y que pretende fortalecer la economía en beneficio de todos los argentinos".
Lagarde dio su "respaldo" a las reformas económicas que tienen lugar en Argentina y dijo sentirse "complacida" de poder "contribuir" a los esfuerzos del gobierno para fortalecer la economía "brindando respaldo financiero, que apuntalará la confianza del mercado, dándoles a las autoridades tiempo para abordar un abanico de vulnerabilidades de larga data".
"Como parte de ese respaldo, tanto el FMI como el gobierno argentino tienen intención de colaborar para que se tomen las medidas y se activen integralmente los recursos necesarios a fin de proteger a la población más vulnerable a medida que avancen las reformas económicas", aclaró la titular del Fondo.
En ese sentido, Lagarde dio la "bienvenida a la intención de las autoridades de acelerar el ritmo de reducción del déficit del gobierno federal, restableciendo el balance primario para 2020".
"Esta medida tendrá en última instancia el efecto de reducir las necesidades de financiamiento del gobierno, encauzar la deuda pública por una trayectoria descendente y, como lo ha señalado el Presidente Macri, aliviar una carga que lleva a cuestas Argentina", sostuvo.
A su vez, "nos alienta también el compromiso de las autoridades por dejar aseguradas la independencia jurídica y la autonomía operacional del banco central y por poner fin de inmediato al financiamiento del déficit federal por parte del banco central" y respaldó la decisión del BCRA "de adoptar metas de inflación realistas y significativas", concluyó la máxima representante del FMI.
