Buenos Aires-. Un insólito, curioso y tierno episodio ocurrió el viernes en el tren Sarmiento, en una formación que se dirigía hacia Moreno. Un señor mayor, como si se tratara de un vendedor, comenzó a repartir una nota junto a un billete de $200.
La actitud del abuelo sorprendió en un principio a los pasajeros, quienes no entendían bien qué estaba pasando o pensaron que el señor no se encontraba bien mentalmente.
Pero después el hombre se emocionó y, con lágrimas en los ojos, dijo que quería repartir su dinero para poder hacer feliz a las personas.
El escrito que estaba junto al billete manifestaba: “Señoras y señores pasajeros, los invito a compartir esta experiencia. Lo opuesto a la ambición desmedida y la indiferencia, que tanto daño hace a los seres que queremos ser humanos, es la práctica de dar sin esperar nada a cambio. Lo poco o mucho que damos sin esperar nada a cambio nos ayuda a vivir mejor. ¡Practíquenlo!”.