RIO GRANDE.- Stefanía Gisser, una joven estudiante riograndense de 19 años, tuvo un gesto digno de imitar. Impulsada por su afán de agradecer, compró bombones y se los entregó a los choferes de colectivos.
El gesto de Stefi sucedió hace aproximadamente un mes y hubiese pasado desapercibido a no ser porque uno de los choferes que recibió uno de esos bombones, compartió la historia en las redes sociales y se viralizó de manera inmediata.
Esta situación fue conocida por este medio quien quiso saber más sobre la historia y logró conocer a la protagonista de esta experiencia en las mismas instalaciones de la empresa CityBus, donde la chica fue invitada para compartir un almuerzo de camaradería con los trabajadores y representantes de la firma.
En diálogo con este medio, la estudiante contó que a diario, viaja en colectivo desde su casa, ubicada en Chacra XIII, hasta la UTN (Universidad Tecnológica Nacional), donde estudia abogacía en la UCES (Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales).
“Soy una usuaria del colectivo. Me tomo siempre el A y siempre noto que las personas no saludan a los choferes. No le dicen ni buenas tardes, ni buenas noches y eso me motivó a tomar una iniciativa”, por eso, “un día decidí darles a los choferes un presente para que ellos puedan ver que que hay gente que agradece sus servicios y por estar manejando todo el día. Quise hacerlo para reconocer su dedicación y su esfuerzo”, reveló Stefi.
Con una naturalidad sorprendente, recordó que un día se tomó el trabajo de ir a comprar una cierta cantidad de bombones a los que les adhirió a un pequeño trozo de cartulina en el que, a mano, les escribió un mensaje donde les desea que tengan un buen día y les agradece la dedicación al trabajo que realizan.
“Compré 10 bombones y a todos les coloqué la tarjetita. Un domingo, me levanté a la 06:00 y, con la ayuda de la aplicación (Cuándo llega), esperé a que comiencen a pasar los colectivos. Los paraba y les entregaba el presente”. A pesar del gran gesto que estaba realizando, Stefi, se lamentó de que haya sido un domingo. “Los domingos, los colectivos pasan cada media hora, entonces se me complicó un poco poder entregar los diez bombones así que sólo logré entregar 6”.
Al explicar su accionar, la joven dijo que “hay que comenzar a agradecer más porque, quizás esa persona esté pasando por problemas y con un pequeño gesto de amabilidad o simplemente con un agradecimiento, uno le puede cambiar el día a esa persona e inspirarla a que imite ese gesto.
La joven explicó que debemos generar el hábito del agradecimiento y hacer que las demás personas también tengan un buen gesto para con otra persona.
Estamos inmersos en una sociedad en que solo vemos malas noticias. Si te ponés a prestar atencion, parece que todo fuera malo y todo negativo por eso es bueno que todos comencemos a hacer cosas buenas aunque sean cosas pequeñas
Cabe señalar que Stefanía Gisser, tuvo un gesto de agradecimiento para con los choferes de colectivos de CityBus pero no es el único tiene en su haber. En reiteradas oportunidades se ha involucrado en acciones de beneficencia. En otras, “me gusta charlar con los la gente a la que veo en la calle y les ofrezco un poco de compañía”, dijo.
“Aunque no tengo plata, muchas veces me quedo charlando con la gente que se encuentra vendiendo en la calle y sólo les brindo un poco de mi tiempo y mi compañía. Hay gente que piensa que sólo se puede ayudar a los que necesitan dándoles dinero pero hay otras cosas que llenan el corazón”.
Finalmente entendió que “dedicarle un poco de tiempo a una persona, escucharla, entender cómo se siente y saber cómo está pasando su día puede ayudar mucho a una persona. Con pequeños detalles le podemos cambiar la vida a las personas o podemos mejorarle su día”.
