PROVINCIALES

Sigue en pésimo estado acceso vehicular de la Escuela 2

A pocos días de celebrar 92 años albergando a miles de estudiantes fueguinos, el icónico establecimiento escolar sigue sin recibir mejoras en su aspecto exterior. Hace cinco meses, delfuego noticias denunció la misma situación y, al parecer, las autoridades aún no se hacen cargo del lamentable estado de la escuela.  

La laguna cubre prácticamente todo el estacionamiento.
La laguna cubre prácticamente todo el estacionamiento.
El 18 de mayo del presente año, delfuego noticias dio a conocer el lamentable estado exterior de la Escuela 2 ‘Benjamín Zorrilla’, ubicada en pleno centro y convertida desde hace décadas en símbolo educativo de la ciudad y la provincia.

En aquel momento, el estacionamiento ubicado en la intersección de la avenida San Martín y Rosales, sufría las consecuencias de un invierno lluvioso y frío, con lagunas de agua y hielo que complicaban el acceso vehicular.

Sin embargo, cinco meses después y en plana primavera, la cosa no cambio y, por el contrario, se agudizó dado que las lagunas se agigantaron y prácticamente no hay lugar que no haya quedado cubierto por el agua.

Así, prácticamente no hay lugar para estacionar. Salvo un par de vehículos que se ubicaron sobre uno de los muros de calle Rosales, el resto del escaso espacio no puede utilizarse dada la profundidad de la laguna.

Además, se acumula basura en toda la zona. Abundan las bolsas de residuos, los restos de bolsas plásticas, botellas y cuanto elemento sea arrastrado por el viento hasta la zona, que evidentemente carece de una limpieza al menos periódica.

Lamentablemente, los días pasan y nadie se hace cargo. Ni el Ministerio de Educación ni Obras Públicas se ponen al frente del mantenimiento del estacionamiento, necesario para que los docentes guarden sus vehículos dado que en la zona escasean los lugares disponibles para aparcar los autos.

Una vez más, la desidia y el desinterés quedan en evidencia y atentan contra el aspecto de una institución icónica en la ciudad que, como tantas otras, aguarda en silencio el mantenimiento que le corresponde al menos por antigüedad y servicios prestados a la comunidad.
 

¿Compartís la nota?