Castillo: “No vamos a dejar pasar por alto esto porque hacemos un gran esfuerzo”

La secretaria de Asuntos Sociales del Municipio de Río Grande, Gabriela Castillo, brindó una conferencia de prensa para referirse a la suspensión de provisión de agua potable al barrio Esperanza, en los asentamientos de Margen Sur, tras la agresión sufrida por un chofer del servicio.

Castillo comenzó diciendo que “nosotros tenemos la distribución de agua en los asentamientos que no tienen agua corriente y en el día de ayer, uno de los cuatro camiones, que estaba haciendo la distribución en el barrio Esperanza, fue interceptado en la calle Holpin y se le interrumpió el paso”.

“El camionero estaba acompañado por personal municipal que lleva el control de la distribución y que establece el recorrido para cada día. Fueron amenazados con piedras, verbalmente hasta de prenderles fuego el camión si no iba a otro sector del barrio a hacer la distribución”, develó la funcionaria que además precisó: “El camionero fue obligado a llevar agua a otras casas que no tenía en el recorrido directo, lo que es una situación por demás desagradable. Como Municipio no estamos dispuestos a trabajar en esas condiciones porque entendemos que lo que debe primar es el respeto”.

Contó que “invertimos mucho dinero en poder hacer realidad este servicio de distribución de agua y nadie merece verse hostigado en el desempeño de sus funciones sea personal municipal o personal contratado a tal fin”.

Servicio suspendido

Por otro lado, Castillo remarcó que “la decisión de suspender la distribución de agua es particularmente en el barrio Esperanza hasta tanto podamos tener la reunión con los referentes del barrio y llegar a una cuerdo respecto a las garantías para que esto pueda reanudarse”.

“Los cuatro camiones están trabajando en otros puntos del asentamiento y se desarrolla con normalidad. Es válido hacer la salvedad de que no es una situación a la que nosotros nos vemos expuestos normalmente”, aclaró.

Así, contó que “en los otros barrios no hemos tenido este tipo de dificultades y es más, no hemos tenido ningún tipo de dificultad con el servicio que presta el transporte que se ha visto involucrado en esa situación ni tenemos reclamos de los vecinos por el servicio”.

Respecto a si habían mantenido contacto con los vecinos de la zona, la funcionaria develó que “aún no he tenido contacto personal con los vecinos. Anoche lo llamé al referente del barrio, no contestaron la llamada pero voy a insistir para que nos juntemos esta jornada y ver de qué manera puede interceder ante los vecinos para que esto no vuelva a suceder”.

“No identificados directamente a las personas pero sí sabemos que había menores y mayores en esta situación. Lo importante es que la comunidad sepa lo que sucedió, el Municipio no va a dejar pasar por alto esto porque realmente es un gran esfuerzo el que hace el Municipio para garantizar condiciones con calidad de vida para la población aun cuando vivan en los asentamientos”, resaltó.

En la misma línea, expresó: “No tenemos injerencia directa sobre todos los barrios y así y todo destinamos cinco millones de pesos para hacer la distribución de agua a este sector que realmente es de una importante porción de la población”.

Móvil político

Ante los reclamos que comenzaron a surgir en las últimas semanas, Castillo no tuvo dudas al decir que “seguramente hay un móvil político, porque aparecen siempre por detrás personas que persiguen otros intereses y que son intereses individuales”.

“Por eso yo no generalizo la situación, entiendo que es un grupo minúsculo de vecinos y que va en perjuicio de la totalidad de las familias de ese barrio, que son unos cuantos cientos de familias”, aclaró.

Finalmente, Gabriela Castillo admitió que “es desagradable que los demás vecinos se vean involucrados en un corte de servicio por vecinos que no supieron adaptarse a una norma urbana y de respeto, como lo que sucedió ayer. Esto tiene muchas caras y quienes persiguen otros intereses siempre buscan hacer escenas de este tipo”.