En declaraciones a ‘Contra Reloj’ que se emite por Radio Popular, Ballarini contó que “el pedido de ingreso de los colectivos al barrio lo tenemos desde que empezó esta nueva empresa. Cuando se le planteó el cruce, la empresa pidió la seguridad ante esto, lo que implicaba la colocación de algún tipo de señalización como un reductor de velocidad, semáforo, alguna que otra luz y la cartelería para poder tener una buena maniobra”.
“Cuando colocamos los reductores, Vialidad Nacional nos planteó que son los único autorizados para hacer obras porque es una ruta nacional, por lo cual tuvimos que sacar todo lo que habíamos colocado”, develó el funcionario.
Sin embargo, reconoció que “hay un principio de acuerdo con la empresa para poder hacer el cruce con vehículos municipales de tránsito en horarios determinados, para hacer el control vehicular”.
“Esto surge a partir de la situación con Vialidad Nacional y que la empresa se niega si no hay normas de seguridad básica. Si se golpea una persona, nos vemos involucrados porque la ordenanza dice que no deben pasar por ahí”, explicó.
Finalmente, Alfredo Ballarini reconoció que “hablamos de paliativos y a veces la gente se enoja, pero algo tenemos que hacer en la zona. Tenemos que dar una solución porque hay un barrio, la gente vive ahí y vamos a tener que seguir trabajando”.
