RIO GRANDE.- La provincia de Tierra del Fuego vivió este miércoles una jornada de intensa movilización, con actos multitudinarios tanto en Río Grande como en Ushuaia, en el marco de un paro general que busca rechazar la quita de aranceles que perjudica a la industria fueguina. Las manifestaciones, contundentes en su mensaje, se alzaron contra los decretos 333 y 334 del Gobierno Nacional, que pretenden avanzar con medidas que involucran directamente a la industria y al subrégimen de promoción de la isla.
En Río Grande, la protesta tuvo su epicentro frente a una de las plantas de Mirgor, donde dirigentes de diversos gremios, estudiantes, veteranos de Malvinas y otros sectores alzaron su voz. Las expresiones unánimes de rechazo a las políticas nacionales se escucharon fuerte, con los metalúrgicos reiterando su postura de no acatar ninguna conciliación obligatoria y asegurando que retornarán a las fábricas "con la totalidad de los efectivos y los contratados", sin permitir la pérdida de un solo puesto de empleo.
En la capital provincial, Ushuaia, la movilización contó con la participación de Abel Furlan, secretario General de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) a nivel nacional, lo que le otorgó una mayor visibilidad y respaldo a la protesta.
Los canales nacionales cubrieron ambas manifestaciones, destacando el marco de unidad y la solidaridad lograda para esta huelga general por tiempo indeterminado de la UOM en ambas seccionales de la provincia. Los sindicalistas advirtieron sobre la conciencia existente respecto de que están transitando una lucha "larga y compleja", pero con el firme compromiso de llegar hasta el final "con todos los compañeros y las compañeras adentro". La jornada se consolida como una muestra del fuerte descontento y la determinación de la provincia en la defensa de su modelo productivo y sus fuentes de trabajo.